jueves, 13 de mayo de 2010

Pergamino y las inversiones...

Las condiciones económicas de un determinado lugar están sujetas a factores culturales propios de cada lugar. Existen factores culturales que formatean la actividad económica con más riesgo que otras. El riesgo es una de las variables que se contemplan cuando se realiza la inversión y la misma emana de la propia sociedad.

Pertenecemos a una sociedad conservadora, no muy propensa a los riesgos empresariales. En los últimos tiempos no ha habido inversiones importantes en la ciudad.
La causa más notable la podemos encontrar en la propia “cultura agrícola”, que depende de los recursos naturales y los factores climáticos. Mirado desde el punto de vista del proceso del negocio es sencillo percibir que el sector industrial es más activo y complejo que las actividades agrícolas. Además de generar más valor, obliga al empresario a desarrollar actitudes relacionadas con la comercialización, el desarrollo, la investigación, la capacitación de los recursos humanos, entre otras. El sector agrícola es más básico.
Nuestra estructura económica es mayoritariamente agrícola.

Las inversiones privadas que se han realizado, en su gran mayoría, han estado relacionadas con el efecto soja. Esto produjo el boom inmobiliario (construcción de varios edificios en la ciudad y barrios cerrados).

Las inversiones privadas más importantes fueron:

- Relacionadas con el servicio (Bingo, Shopping, Hoteles)
- Edificios, countries o barrios cerrados, construcción particular.
- No muchas empresas con inversiones importantes y relacionadas con la producción fueron instaladas.

Crecieron de manera importante algunas que ya estaban funcionando con un buen rendimiento y aprovecharon la ventaja de estar armados para cuando pasó la tormenta del 2001 / 2002. Por citar algunas, Rizobacter, Inpla, Ossira.

Las inversiones públicas más importantes fueron:

- 3 cuadras de Peatonal San Nicolás
- Viaducto
- CAP (Centro de Atención Primaria) Acevedo, Belgrano
- Puente Hernández - Kennedy
- Unnoba (reporta al presupuesto nacional)

Lo político tiene mucho que ver con la inversión pública. Pergamino se caracteriza últimamente por estar desalineados respecto a los gobiernos nacionales y/o provinciales.

Sequeiro no recibió a Menem en el 97 y este, dos años después fue electo presidente. Sequeiro fue intendente hasta el mismo momento que Menem fue presidente.

En el 99 Gutierrez asume la intendencia y coincide por dos años con el gobierno nacional, pero el gobierno de la Alianza dura solamente 2 años. Años de convulsión política, económica y social.
Percibiendo la necesidad de alinearse con los distritos superiores Gutierrez empieza a alejarse del radicalismo y ya en el 2005 se transforma abiertamente al kirchnerismo hasta junio del 2008, coincidiendo con el gobierno provincial y nacional al punto de ir en las mismas listas en las elecciones. Recordar el palco oficial en la visita del entonces Presidente Kirchner donde a los codazos estaban propios y extraños. La historia nos indica que en definitiva el gobierno local no despertaba demasiada confianza ya que los recursos prometidos superaron por mucho a los que efectivamente llegaron a Pergamino posteriormente.

Desde el conflicto con el campo Gutierrez se saca la camiseta de radical K (kirchnerista) y se pone la camiseta de radical C (cobista). Eso es lo peor que se le puede hacer al matrimonio presidencial. Obviamente desde ese cambio de conducta del intendente actual no ha venido a nuestra ciudad ni un solo peso canalizado por las vías institucionales normales. A diferencia de localidades vecinas que a pesar de ser más pequeñas han recibido en términos absolutos cantidades de dinero importantes para la realización de obras.

Si llegan a nuestro partido, sumas de dinero para obras pero de manera directa a dirigentes locales afines al matrimonio presidencial (Bormioli – Alicia Kirchner, Rugieri – Franetovic).

Esto es producto de un cambio nocivo en la forma de gestionar los recursos del estado. Se pasó a un procedimiento casi “a dedo” donde los recursos llegan según la afinidad de los intendentes para con el poder central.
Da la sensación que vamos dejando pasar las oportunidades, donde los buenos vientos económicos no siempre van a estar dándonos empujones para avanzar.

A partir del año 2003 la economía nacional tuvo un crecimiento importante. Pero en ese lapso no fuimos capaces de crear las condiciones locales que nos garanticen poder seguir funcionando cuando ese crecimiento haya disminuido o directamente se pare como pareció ocurrir después del conflicto gobierno-campo.
En su momento no supimos hacer el verdadero salto cuantitativo.

Por estos días se está promocionando el Plan Estratégico de Pergamino. La gran duda es si será verdaderamente efectivo para reformatear la ciudad y ser atractiva para las inversiones o solamente quedará como un lindo papel pintado.